Jesús, enséñanos a orar. Que tu Palabra sea lámpara para nuestros pasos, luz en nuestro sendero.
María, alcánzanos de tu Hijo, al que adoramos presente en el Santísimo Sacramento, la gracia de vivir siempre de la Palabra salida de sus labios.
Jesús, enséñanos a orar. Que tu Palabra sea lámpara para nuestros pasos, luz en nuestro sendero.
María, alcánzanos de tu Hijo, al que adoramos presente en el Santísimo Sacramento, la gracia de vivir siempre de la Palabra salida de sus labios.
Santísima Trinidad, quiero permanecer fundida en Tu Amor.
Gracias Dios Padre por darme la vida para adorarte, gracias Dios Hijo por elegirme y llamarme tu amiga, gracias Espíritu Santo por llenar mis vacíos de amor e invitarme a ser santa.
Gracias amada María por ser mi Madre y Maestra, mi refugio, mi guía, con el auspicio y la protección de San José.
¡Gracias, siempre gracias!