Jesús, enséñanos a orar. Que tu Palabra sea lámpara para nuestros pasos, luz en nuestro sendero.
María, alcánzanos de tu Hijo, al que adoramos presente en el Santísimo Sacramento, la gracia de vivir siempre de la Palabra salida de sus labios.
Jesús, enséñanos a orar. Que tu Palabra sea lámpara para nuestros pasos, luz en nuestro sendero.
María, alcánzanos de tu Hijo, al que adoramos presente en el Santísimo Sacramento, la gracia de vivir siempre de la Palabra salida de sus labios.
Señor Misericordioso, Tú me conoces, ves mi fragilidad y mi pecado, también conoces este deseo tan grande que tengo de amarte.
Hazme de nuevo. Como a los discípulos, dame una vida nueva llena de Ti. Aumenta mi confianza en Tu Amor y en Tu Misericordia. Haz que cuando dude, sea bañada con Tu Sangre y con Tu Agua que brotan de tu Sagrado Corazón y me hagan a Tu manera. Y esto que te pido para mi, te lo pido para todos, especialmente para los más necesitados de Tu infinita Misericordia.
María, Madre de gracia y de Misericordia, en la vida y en la muerte ampáranos Madre nuestra.