Evangelio de hoy 16 febrero 2025. Padre David de Jesús. Domingo 6 Tiempo Ordinario (Lc 6,17.20-26)
- María con nosotros
- 15 feb
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El Evangelio de hoy (Lc 6,17.20-26):
✠
EN aquel tiempo, Jesús bajó del monte con los Doce, se paró en una llanura con un grupo grande de discípulos y una gran muchedumbre del pueblo, procedente de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón.
Él, levantando los ojos hacia sus discípulos, les decía:
«Bienaventurados los pobres,
porque vuestro es el reino de Dios.
Bienaventurados los que ahora tenéis hambre,
porque quedaréis saciados.
Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.
Bienaventurados vosotros cuando os odien los hombres, y os excluyan, y os insulten y proscriban vuestro nombre como infame, por causa del Hijo del hombre.
Alegraos ese día y saltad de gozo, porque vuestra recompensa será grande en el cielo. Eso es lo que hacían vuestros padres con los profetas.
Pero, ¡ay de vosotros, los ricos,
porque ya habéis recibido vuestro consuelo!
¡Ay de vosotros, los que estáis saciados,
porque tendréis hambre!
¡Ay de los que ahora reís,
porque haréis duelo y lloraréis!
¡Ay si todo el mundo habla bien de vosotros!
Eso es lo que vuestros padres hacían con los falsos profetas».
Textos para profundizar:
San Juan de la Cruz. Cántico espiritual:
7. ¡Oh, pues, alma hermosísima entre todas las criaturas, que tanto deseas saber el lugar donde está tu Amado, para buscarle y unirte con él! Ya se te dice que tú misma eres el aposento donde él mora y el retrete y escondrijo donde está escondido; que es cosa de grande contentamiento y alegría para ti ver que todo tu bien y esperanza está tan cerca de ti, que esté en ti, o, por mejor decir, tú no puedas estar sin él. Catá, dice el Esposo (Lc. 17, 21), que el Reino de Dios está dentro de vosotros. Y su siervo el apóstol san Pablo (2 Cor. 6, 16): Vosotros, dice, sois templo de Dios.
8. Grande contento es para el alma entender que nunca Dios falta del alma, aunque esté en pecado mortal, cuánto menos de la que está en gracia. ¿Qué más quieres, ¡oh alma!, y qué más buscas fuera de ti, pues dentro de ti tienes tus riquezas, tus deleites, tu satisfacción, tu hartura y tu reino, que es tu Amado, a quien desea y busca tu alma? Gózate y alégrate en tu interior recogimiento con él, pues le tienes tan cerca.
(San Juan de la Cruz. Cántico espiritual B 1,7-8).
Oración colecta
OH, Dios, que prometiste permanecer
en los rectos y sencillos de corazón,
concédenos, por tu gracia, vivir de tal manera
que te dignes habitar en nosotros.
Por nuestro Señor Jesucristo.
Primera Lectura Jer 17,5-8
ESTO dice el Señor:
«Maldito quien confía en el hombre,
y busca el apoyo de las criaturas,
apartando su corazón del Señor.
Será como cardo en la estepa,
que nunca recibe la lluvia;
habitará en un árido desierto,
tierra salobre e inhóspita.
Bendito quien confía en el Señor
y pone en el Señor su confianza.
Será un árbol plantado junto al agua,
que alarga a la corriente sus raíces;
no teme la llegada del estío,
su follaje siempre está verde;
en año de sequía no se inquieta,
ni dejará por eso de dar fruto».





Buen y bendecido domingo, día del Señor!!! Que gran alegría escucharle, con este hermoso evangelio, queridísimo Padre David
9 mayo 1985
“Queridos hijos, no sois conscientes de las gracias que el Señor os
concede. En estos días en que el Espíritu Santo está obrando de una
manera especial, vosotros no queréis avanzar. Vuestros corazones
están vueltos hacia los bienes terrenos, y esos bienes os preocupan.
Volved vuestros corazones a la oración y pedid que el Espíritu
Santo se derrame sobre vosotros. Gracias por haber respondido a mi
llamada”.
Doy gracias a Dios por todos los bienes recibidos y por no vivir apegada a ellos...vivir como si nada tuviera...Hace muchos años decidí no tener títulos, a pesar de haber estudiado mucho...trabajo…
Jesús, yo confío en Tí. Si Tú me dices que he de ser feliz por las cosas que en la tierra no dan felicidad, yo te creo. Pero dame la gracia, contigo todo, sin Ti, nada.
Si Tú me quieres bienaventurada, lo seré, no me cabe la menor duda.
No me quiero acostumbrar a Ti, ayúdame a profundizar cada vez más en Tu Palabra y en Tu Presencia.
Feliz domingo. La Paz del Señor.