El Evangelio de hoy (Mc 5,1-20):
✠
EN aquel tiempo, Jesús y sus discípulos llegaron a la otra orilla del mar, a la región de los gerasenos. Apenas desembarcó, le salió al encuentro, de entre los sepulcros, un hombre poseído de espíritu inmundo. Y es que vivía entre los sepulcros; ni con cadenas podía ya nadie sujetarlo; muchas veces lo habían sujetado con cepos y cadenas, pero él rompía las cadenas y destrozaba los cepos, y nadie tenía fuerza para dominarlo. Se pasaba el día y la noche en los sepulcros y en los montes, gritando e hiriéndose con piedras. Viendo de lejos a Jesús, echó a correr, se postró ante él y gritó con voz potente:
«¿Qué tienes que ver conmigo, Jesús, Hijo de Dios altísimo? Por Dios te lo pido, no me atormentes».
Porque Jesús le estaba diciendo:
«Espíritu inmundo, sal de este hombre».
Y le preguntó:
«Cómo te llamas?».
Él respondió:
«Me llamo Legión, porque somos muchos».
Y le rogaba con insistencia que no los expulsara de aquella comarca.
Había cerca una gran piara de cerdos paciendo en la falda del monte. Los espíritus le rogaron:
«Envíanos a los cerdos para que entremos en ellos».
El se lo permitió. Los espíritus inmundos salieron del hombre y se metieron en los cerdos; y la piara, unos dos mil, se abalanzó acantilado abajo al mar y se ahogó en el mar.
Los porquerizos huyeron y dieron la noticia en la ciudad y en los campos. Y la gente fue a ver qué había pasado.
Se acercaron a Jesús y vieron al endemoniado que había tenido la legión, sentado, vestido y en su juicio. Y se asustaron.
Los que lo habían visto les contaron lo que había pasado al endemoniado y a los cerdos. Ellos le rogaban que se marchase de su comarca.
Mientras se embarcaba, el que había estado poseído por el demonio le pidió que le permitiese estar con él. Pero no se lo permitió, sino que le dijo:
«Vete a casa con los tuyos y anúnciales lo que el Señor ha hecho contigo y que ha tenido misericordia de ti».
El hombre se marchó y empezó a proclamar por la Decápolis lo que Jesús había hecho con él; todos se admiraban.
Ya le echaba de menos, Padre David🙏🙏hacia días que no le escuchaba sus enseñanzas🙏🙏Gracias por estar ahí!!
Queridísimo Padre David, buen y bendecido día!!! Que la Reina de la Paz os bendiga con su bendición maternal...Madre ruega por nosotros y por la Paz del mundo entero... amén
Comparto un mensaje hermoso...
Porque pensaba en este combate espiritual...y en los espíritus impuros que dominaban a este hombre...
22 junio 1985
La Gospa inspiró a Jelena para escribir esta oración y decirla en el
pequeño grupo de oración. SÚPLICA A DIOS. “Oh Dios, nuestros
corazones están en profunda oscuridad, a pesar de estar unidos a tu
corazón. Nuestros corazones están entre Ti y Satanás; ¡No permitas
que sea así! Cada vez que nuestros corazones se dividan entre el
bien y el mal permite que se iluminen con tu luz…
Que bendición que esté nuevamente con nosotros, seguro saldran muchos frutos de su retiro. Dios los bendiga 🙏
Que alegría cuando me dijeron vamos a la casa del Señor, si ese es el camino que usted está abriendo brecha para nosotros, el camino al Camino.
Gracias
Señor, a mí también me vienes cambiando la vida cada día, y lo que más deseo es estar contigo.
Tu Amor Señor me da la libertad, me renueva cada día, me hace ver todo nuevo. ¡¿Cómo no amarte y cómo no desear estar siempre contigo?!.
Te ruego me des un corazón siempre fiel a Tí. Gracias porque siento Tu presencia y compruebo con hechos que me asistes, amas y proteges cada instante de mi vida.
"No hay Santo sin pasado, ni pecador sin futuro", esta verdad me alienta y me llena de esperanza.
Que alegría tan grande volver a tener la explicación diaria de los Evangelios. Gracias Padre David. Unidos en oración.
La Paz del Señor