El Evangelio de hoy (Jn 3,13-17):
✠
EN aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo:
«Nadie ha subido al cielo sino el que bajó del cielo, el Hijo del hombre.
Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna.
Porque tanto amó Dios al mundo, que entregó a su Unigénito, para que todo el que cree en él no perezca, sino que tenga vida eterna.
Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él.
El que cree en él no será juzgado; el que no cree ya está juzgado, porque no ha creído en el nombre del Unigénito de Dios».
"Te alabamos oh Cristo y te bendecimos, porque por tu Santa Cruz redimiste al mundo".
Aunque me estremece el verte clavado en el madero, que no me canse de contemplarte, de agradecerte, de aliviar Tus dolores, aunque sea un poquito.
Que Tu Amor me fortalezca y me transforme, que mi corazón sea el trono donde sólo Tu Reinas.
Cuánto deseo que vuelvas a Reinar en el mundo entero..., cuenta conmigo Señor, dime qué debo hacer para que todos te aceptemos como único y verdadero Rey.
Gracias Padre David, me alegra mucho verlo y seguir aprendiendo de Usted. La Paz del Señor.
Gracias amado Jesús por tu gran amor por cada uno de nosotros hoy exaltamos tu Santa Cruz permitirme Señor la gracia de siempre estar amándote y bendiciendote.
Padre David qué alegría y gusto poder saludarlo y escuchar la gran enseñanza del evangelio Jesucristo siempre lo acompañe y bendiga su vida y ministerio amén.🙏🙏❣️❣️