El Evangelio de hoy (Jn 16,29-33):
✠
EN aquel tiempo, los discípulos dijeron a Jesús:
«Ahora sí que hablas claro y no usas comparaciones. Ahora vemos que lo sabes todo y no necesitas que te pregunten; por ello creemos que has salido de Dios».
Les contestó Jesús:
«¿Ahora creéis? Pues mirad: está para llegar la hora, mejor, ya ha llegado, en que os disperséis cada cual por su lado y a mí me dejéis solo. Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo».
Textos para profundizar:
Antífona de entrada Hch 1, 8
Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo que va a venir sobre vosotros, y seréis mis testigos hasta el confín de la tierra. Aleluya.
Oración colecta
LLEGUE a nosotros, Señor,
la fuerza del Espíritu Santo,
para que podamos cumplir fielmente tu voluntad
y demos testimonio con una conducta santa.
Espero le guste padre David de Jesús! Reciban mis deseos de un hermoso Pentecostes!!! Un fuerte cariño para todos!!! Mónica.
¿Señor, a qué temeré si Tú has vencido al mundo?
Confío en Tí y espero con paciencia el cumplimiento de Tus promesas. Envíame la fuerza de Tu Santo Espíritu, para que con determinación renuncie a mi voluntad humana y acoja la Voluntad de Dios, como María, intentando dar testimonio de la acción de Dios siempre.
Hoy en el día de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, doy gracias a Dios por enviarnos a María a través de esta y de tantas otras apariciones. La quiero escuchar, amar y obedecer. Ella es el camino más corto y seguro para llegar al cielo.
Gracias Padre David por esta hermosa reflexión que me anima en la espera de la venida del Espíritu Santo.
Jn 16:29-33. "Non sum solus". "No estoy solo".
Todo lo creado
me va a faltar,
ahora está a mi lado,
después no está.
La hora ya ha llegado,
todos se van,
todos por su lado
continuarán.
El tiempo ha pasado,
no volverá,
risas en tus labios
recordarás.
Mi piel se ha arrugado,
no brilla ya,
los brazos cansados
de trabajar.
Y lo disfrutado
se queda atrás,
y ni me he enterado,
ya no vendrá.
Y no la he buscado
pero aquí está,
es un gran regalo
la soledad.
Ahora veo claro,
no hay nada ya
que me esté apartando
de la Verdad.
Cristo está a mi lado,
me ayudará,
nunca me ha dejado,
me sostendrá.
Y con el rosario
la Virgen…