El Evangelio de hoy (Mt 9,14-15):
✠
EN aquel tiempo, los discípulos de Juan se le acercan a Jesús, preguntándole:
«¿Por qué nosotros y los fariseos ayunamos a menudo y, en cambio, tus discípulos no ayunan?».
Jesús les dijo:
«¿Es que pueden guardar luto los amigos del esposo, mientras el esposo está con ellos? Llegarán días en que les arrebatarán al esposo, y entonces ayunarán».
Queridísimo Padre David y Padre Alfredo, buen y bendecido día !!!
Cuán feliz me ha hecho hoy al escucharle...sé que puede comprender la inmensa alegría que siente mi corazón al oírle hablar de nuestra Madre ...la Reina de la Paz...
Este mensaje sobre el ayuno...es muy especial para mí...
196. 28 enero 1987
Mensaje a Mirjana en Sarajevo. “Mis queridos hijos, he venido a
vosotros para guiaros hacia la pureza del alma y así hacia Dios.
¿Cómo me habéis acogido? Al principio no creísteis y tuvisteis
temor y desconfianza hacia los jóvenes que escogí. Después todos
me escuchabais con el corazón y pusisteis en práctica mis súplicas
maternales. Pero eso no duró mucho. Sabed que siempre que vengo
a vosotros,…
LA PAZ DEL SEÑOR MI QUERIDO PADRE Y HERMANO DE MI ALMA, GRACIAS POR ESTAR SIEMPRE.
ACA EN ARGENTINA SON LAS 02:18 DE LA MADRUGADA, Y TENGO MUCHO SUEÑO, PERO AMO ESCUCHARTE TODAS LAS NOCHES ANTES DE ACOSTARME.
LOS QUIERO MUCHO A LOS DOS.
Oración sobre las ofrendas
Te ofrecemos, Señor, el sacrificio de nuestra observancia cuaresmal, que vuelva más aceptables a ti nuestros corazones y nos haga más diligentes en la penitencia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Que hermosa oración. La dimensión y el esfuerzo de nuestros sacrificios y penitencias no es lo más importante, sino el amor y la humildad con que se ofrecen. Es la gracia de Dios la que transforma nuestros corazones y hace que, seducidos por Su Amor infinito, ofrezcamos con gozo las penitencias.
¡Bendito sea Dios!
¡¡¡Doy gracias a Dios por toda su creación y por el delicioso café de Colombia, que en verdad es muy rico!!!.
Dios, yo como Tu pequeña hija no hago más que pedirte regalos y más regalos. Hoy me pongo como el barro fresco en manos del Alfarero divino y con humildad te pido la madurez espiritual que Tú me quieras dar. Gracias porque en esta familia María con nosotros, a través de las enseñanzas de los Padres Alfredo y David, con los Evangelios y con los escritos de San Juan de la Cruz vienes iluminando mi conciencia y me vienes invitando a cambiar para bien, poniendo en mi alma el deseo de la santidad.
Dulce Reina de la Paz ayúdame…